Santander

Lugar. La Caverna de la Luz
Fecha. Desde el 5 de septiembre de 2019
al 30 de septiembre de 2019

Hora.

El pintor santanderino Jesús Velasco se suma a la serie expositiva del espacio de Javier Vila con la imagen ‘Atarazanas’. Con ella participa en el proyecto ‘Festina Lente’.

Jesús Velasco se decanta tanto por la observación de las peculiaridades geológicas como por las características de la transformación artificial, por los habitantes del medio montañés y alpino...

Ahora echa mano de la imagen precisamente para componer su doble visión, sus dos planos gráficos sobre Santander, una entraña icónica, un mapa y un detalle fotográfico, con el que se integra en la serie expositiva ‘Festina Lente’ de La Caverna de la Luz.

El espacio de la calle del Sol expone este mes de septiembre la propuesta de Velasco bautizada como ‘Atarazanas’.

En primera instancia Velasco (Santander, 1955) concibió una composición muy original que, a su vez, se ajustaba con bastante exactitud a la idea del proyecto. El pintor, que no fotógrafo, establecía una división muy definida del campo fotográfico con dos imágenes que en apariencia nada tenían que ver entre sí.

La primera imagen de conjunto muestra en la parte superior un antiguo y muy conocido plano de la ciudad de Santander de principios del siglo XX (1911), y en la parte inferior una vista actual del puerto. Al establecer una relación entre ambas imágenes, el autor hace reflexionar sobre el profundo cambio que desde entonces ha sufrido la ciudad, y cuya demostración visual sirve como constatación y manifestación paso del tiempo.

En ‘Atarazanas’, establece de nuevo la división en dos planos gráficos diferentes, además de extremar el anacronismo ente ambos. En el registro superior reproduce una versión coloreada de la ‘Vista de Santander’, según el antiguo grabado del siglo XVII de Daniel Meisner, tomada a su vez del que se reproduce en la obra del ‘Civitatis orbis terrarum’, de Braun y Hogenberg (1564).
En esta entrega, con la que ahora participa, se revela «el expresionismo de las diagonales convergentes de los dos recortes fotográficos que componen la parte inferior, además de la vibración de sus luces y sombras en perfecto claroscuro y los sutiles matices de color que bellamente les caracteriza».